El médico infectólogo Tomas Orduna analizó esta mañana por la Nueva Nueve las medidas de aislamientos y distanciamiento (cuarentena) que se comenzaban a adoptar hace cinco años cuando se detectaron los primeros casos de Covid-19 en nuestro país y el virus avanzaba en otros países del mundo, dejando miles de internados y muertos.

En diálogo con “Amanecer no es poco”, Orduna dijo que la cuarentena estuvo bien aplicada, teniendo en cuenta que era un fenómeno absolutamente desconocido. “No había antecedentes. Hoy en la revisión que se ha hecho desde la OMS, desde los ministerios, desde la revisión que podemos estar haciendo en grupos cuando hablamos de lo que ocurrió, cómo fue y cómo lo manejamos, en términos generales estoy convencido que en Argentina lo manejamos muy bien” sostuvo el infectólogo.

Orduna señaló que “podemos discutir si abríamos una semana antes o una semana después una escuela o la posibilidad de hacer bares al aire libre. Podemos discutir los plazos con posturas más restrictivas menos restrictivas. Pero la cuarentena nos permitió armar un sistema de salud para dar respuesta cuando llegó el pico de casos”.

En esye sentido, el especialista remarcó que “si el pico de casos hubiese sido en el otoño del 2020, ahí la tragedia hubiera sido infinitamente peor. Porque nuestro sistema sanitario, que es bueno dentro de los sistemas sanitarios de Latinoamérica,  no estaba preparado. Recordemos que para la primavera del 2020, logramos tenes 4000 camas con respiradores nuevos en todo el país”.

Por último, Orduna fue categórico y dijo que “es mentira que esta fue la cuarentena más grande del mundo. Es una falacia absoluta. Estamos en el intermedio entre las cuarentenas más poderosas, que es la de China, y las menos poderosas que podría ser Suecia. Nuestra respuesta no fue ni la más extrema ni la más blandita”.

“La terrible cifra de personas fallecidas por COVID está dentro de una buena respuesta al COVID. Lo aclaro porque si no estamos todo el día viendo grandes titulares que todo lo que pasó acá fue lo peor. Es absoluta falacia” concluyó el médico infectólogo.