El Ministerio de Exteriores egipcio anunció ayer domingo, la celebración, el próximo 27 de febrero, de una "cumbre árabe de emergencia" para tratar "los peligrosos acontecimientos" en la Franja de Gaza después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentara una iniciativa para expulsar a la población gazatí durante la reconstrucción del enclave.
Aunque Trump ha esgrimido que este "realojo" podría tener un carácter meramente temporal, su propuesta recibió una ola de repulsa procedente de organismos internacionales como Naciones Unidas y los países árabes más Irán y otros aliados del pueblo palestino al considerar que se trata simplemente de una limpieza étnica encubierta y la destrucción de su identidad.
El presidente norteamericano fue más allá al señalar: “En cuanto a la reconstrucción, podemos dársela a otros Estados de Oriente Próximo para que construyan secciones de ella. Otras personas pueden hacerlo bajo nuestros auspicios, pero estamos comprometidos a poseerla, tomarla y asegurarnos de que Hamás no vuelva a ocuparla"
Trump hizo estas declaraciones ante los medios de comunicación desde el 'Air Force One'. Trump, tal y como ha hecho en los últimos días, y ha remarcado que "el lugar es un sitio de demolición" y que "no se puede vivir en esos edificios. (EP)