"La violencia en el mundo está en su punto más alto desde el final de la Guerra Fría", ha alertado la profesora del Instituto de Investigación para la Paz de Oslo (PRIO) Siri Aas Rustad, principal investigadora del informe 'Tendencias de los conflictos: Una visión global'.
Rustad ha explicado que los conflictos se han vuelto cada vez más complejos, con un mayor número de actores que operan dentro de un mismo país. Este último año se han registrado 59 conflictos, si bien el número de países que los han sufrido han descendido de 39 a 34, destaca.
"El aumento de los conflictos estatales puede atribuirse en parte a la expansión de Estado Islámico por Asia, África y Oriente Próximo, y al incremento de la participación de otros actores no estatales, como el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes" --una rama de Al Qaeda que opera en el norte y en el África Subsahariana--, cuenta Rustad.
La evolución cada vez más compleja de este tipo de conflictos internos dificulta a su vez el margen de maniobra de la sociedad civil y los grupos de ayuda que pretenden mejora la vida de las personas, añade la investigadora del PRIO.
Que estos últimos tres años hayan sido los más violentos de las últimas tres décadas, con un aumento "espectacular" de las muertes en combate se debe principalmente a la guerra civil etíope, la invasión rusa de Ucrania y los bombardeos de Israel sobre la Franja de Gaza
"En 2023 se produjeron un total de 122.000 muertes en combate, con más de 71.000 personas muertas en Ucrania y unas 23.000 en Gaza en menos de tres meses de 2023", explica el informe, que sitúa además a África como la región con más conflictos internos ese año, unos 28.
"El número de conflictos en África casi se duplicó en comparación con hace diez años, pasando de 15 en 2013. En los últimos tres años, África ha sido testigo de más de 330.000 muertes relacionadas con enfrentamientos y combates", añade.
Le sigue Asia, con 17; Oriente Próximo con una decena de conflictos; con otros tres en Europa y uno en América. Si bien se registró un ligero descenso estos últimos años en lugares como Siria, en 2023, los bombardeos sobre Gaza han hecho subir las cifras de fallecimientos hasta los 26.000, de los cuales 23.000 han ocurrido en Israel y Palestina.