Los mandatarios de Francia y Egipto han mantenido ayer lunes una conversación telefónica en la que han mostrado su "firme rechazo" a una ofensiva del Ejército de Israel sobre la ciudad de Rafá, en el sur de la Franja de Gaza, y que sirve de refugio para cerca de 1,5 millones de palestinos. 

"(Macron y Al Sisi) han expresado su firme oposición a una ofensiva israelí sobre Rafá, que no haría sino empeorar la situación obligando a la población a desplazarse al Sinaí", reza un comunicado de la Presidencia francesa. 

Ambos líderes han compartido también su "extrema preocupación" por el deterioro de la "ya catastrófica situación humanitaria" en la Franja, así como por los obstáculos a la entrega de ayuda humanitaria a los civiles, por lo que han subrayado la "urgente necesidad" de aumentar "drásticamente" el flujo de asistencia humanitaria hacia el enclave. 

En relación al conflicto, los dos mandatarios han abordado los riesgos de una escalada en Oriente Próximo tras el intercambio de ataques entre Irán e Israel, a los que han pedido "actuar con la máxima moderación". 

Asimismo, han mostrado su preocupación por la situación en la frontera entre Líbano e Israel, donde el Ejército israelí mantiene enfrentamientos con el partido-milicia chií Hezbolá en el marco de la ofensiva sobre Gaza, y han instado a alcanzar una solución diplomática basada en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. 

Por último, Macron ha agradecido a Al Sisi su participación en la Conferencia Internacional Humanitaria para Sudán, celebrada la semana pasada en París y a la que asistieron representantes de 58 países, quienes lograron recaudar más de 2.000 millones de euros para el plan de respuesta de la ONU con el objetivo de ayudar a paliar una de las crisis humanitarias más graves del mundo.