La reunión paritaria entre los empresarios de colectivos y la Unión Tranviarios Automotor, UTA, en la sede del ministerio de Trabajo de la nación en Capital Federal no prosperó en la jornada de este lunes y por tal motivo el gremio de los choferes de colectivos se declaró en estado de alerta y no descarta posibles medidas de fuerza en los días subsiguientes, si los empresarios no atienden sus demandas de mejoras salariales ante la inflación y la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores.
El gremio reclama para enero un salario inicial formal de 777.700 pesos y para febrero de 972.125 pesos y el pago de una suma no remuneratoria de casi 127 mil pesos por la inflación.
En el encuentro celebrado esta tarde en la sede de la secretaría de Trabajo, dependiente del ministerio de Capital Humano, los gremialistas rechazaron el ofrecimiento que hicieron las cámaras empresarias, que consiste en una suba salarial del 20 por ciento sobre el haber básico de enero de este año más el pago de 60.000 pesos, lo que llevaría el haber de un chofer a algo más de 671 mil pesos en enero.
Las partes acordaron volver a reunirse el miércoles que viene a las 15.30 horas.