El gobierno de Santa Fe propuso ayer transformar la denominada Quinta de Funes, donde funcionó un centro detención clandestino durante la última dictadura militar, en espacio de "educación y cultura".
"Se busca rescatar los principios de memoria, en el sentido de representar la importancia del valor de la vida, de que no vuelvan a haber más dictaduras en la Argentina, de rescatar la democracia", dijo el ministro de Justicia de Santa Fe, Ricardo Silberstein.
El funcionario también destacó la importancia de la expropiación del inmueble: "Vivimos en una época y una sociedad en la que se le dice a la gente que viva el presente".
"Entendemos que, para vivir el presente, es importante tener cuenta las experiencias del pasado. Por eso rescatamos los principios de la memoria, porque no habrá futuro si no recordamos el pasado y tenemos un presente que nos haga pensar en un futuro mejor", argumentó.
La Quinta de Funes, ubicada en la ruta nacional 9, fue utilizada para secuestrar y desaparecer a 16 personas entre septiembre de 1977 y enero de 1978, cuando el jefe del II Cuerpo del Ejército era Leopoldo Galtieri.
El año pasado, el Senado santafesino aprobó la expropiación del predio para construir un sitio dedicado a la memoria.
En ese marco, Silberstein estimó que el lugar abrirá sus puertas en un plazo cercano a los dos años, una vez que concluyan las licitaciones de proyectos.
Planteos
En tanto, las organizaciones que integran el espacio Juicio y Castigo celebraron "la esperada noticia de la expropiación de la Quinta de Funes", aunque formularon objeciones a las políticas encaradas por la provincia.
Reclamaron, al respecto, "el cese del vaciamiento de la Secretaría de Derechos Humanos, la reglamentación de la ley de memoria y la convocatoria a las organizaciones para conformar las comisiones directivas de los sitios de memoria", entre tras reivindicaciones.
La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detuvo en los últimos días a cinco ex oficiales de la Armada acusados de secuestrar, torturar, asesinar y desaparecer ciudadanos durante la última dictadura militar. Entre ellos se enucentra el ex almirante Rodolfo Luchetta, un ex interventor de la provincia de Santa Fe. Las detenciones se produjeron en cuatro domicilios en la Capital Federal, Punta Alta y Bahía Blanca, a raíz de una investigación para dar con el paradero de los prófugos.
Fuente: La Capital