El Encuentro antiimperialista para la unidad de acción sesiona este miércoles en Montevideo, con la asistencia de movimientos y organizaciones sociales como antesala de la Jornada Continental por la Democracia y Contra el Neoliberalismo, a celebrarse por tres días en esta ciudad.

El evento tendrá por sede la Central Única de Trabadores de Uruguay PIT-CNT y buscará la concertación del campo popular en el intento de avanzar en comunes denominadores para orientar de mejor manera los debates, tal como declaró en una entrevista el dirigente sindical Oscar Andrade.

Las discusiones girarán en torno a cuatro temas fundamentales: contraofensiva del imperialismo; solidaridad con la lucha de los pueblos en cada país; continuidad de acción en 2018 y llamado de Montevideo.

Para el integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, un factor relevante del cambio lo constituye el movimiento sindical latinoamericano, inclusive, en el sentido contrario, “cuando no tiene el peso suficiente en la gravitación o el grado de conciencia”. Además, puntualizó que cuando tienes un movimiento social fragmentado, divido, con dificultades, “termina siendo uno de los factores que facilita la restauración”.

"Si esto es así -afirmó- hay que operar en consecuencia y este evento previo, a parte de la confraternidad lógica de la lucha social en el continente, se trata de avanzar en el sentido del diseño de la estrategia"."Tenemos que buscar lograr instalar una agenda común con temas que atiendan las peculiaridades nacionales, pero que trate de incluir otros que son estratégicos", expresó. Y en ese sentido, mencionó a los derechos humanos, la defensa de la democracia y de los bienes comunes, los procesos de empoderamiento populares y la batalla por la redistribución social.

Andrade consideró que una de las claves más estratégicas es la unidad, como también ha sido un factor complejo y difícil, pero “sabemos que hay que construirla con mucha paciencia”, enfatizó.

El también dirigente de la construcción recordó la ofensiva neoliberal “muy dura” que se fue dando con el golpe de Estado en Honduras, los procesos de desestabilización en Bolivia, Ecuador y Venezuela, el golpe de Estado parlamentario en Brasil y la restauración neoliberal en marcha en Argentina. 

Fuente: Nodal.am