El suceso provocó el jueves una manifestación de familiares y amigos, quienes piden a la justicia que actúe contra los supuestos abusos perpetrados en la comisaría costera.
La detención de Ezequiel Villalba se produjo el pasado 7 de octubre en el Boulevard “Pedro Candioti”, de San Javier, por tener puesto un buzo que había sido denunciado como robado.
Sin embargo, su empleador Meynet aseguró que la prenda de ropa había sido encontrada por él mismo tirado en la calle y éste se lo obsequió a Villalba, quien era de humilde condición.
Al ser encontrado con la prenda puesta, Villalba habría sido detenido y golpeado brutalmente según los denunciantes del caso en la fiscalía de San Javier.
El propio Villalba falleció una semana después en su casa, aunque la autopsia indicó que la causa de su deceso fue “muerte súbita”.
“Coco” Villalba era “un humilde changarín, vivía en una casa pequeña con sus padres analfabetos, no tenía antecedentes. Era un buen pibe” aseguró a la prensa su patrón, Darío Meynet, quien reiteró su pedido de investigación de lo ocurrido.