Pablo Avelluto, ex Ministro de Cultura durante la presidencia de Mauricio Macri, dialogó en exclusivo con LT9 acerca de la reconstrucción política del PRO y sobre la crítica situación de desfinanciamiento que atraviesa la educación pública. 

"Lo que está pasando en todo el país, en todas las universidades, es gravísimo" aseguró el ex funcionario, quien advirtió tener una "posición muy crítica sobre lo que representa Milei y su proyecto cultural, en el sentido más amplio del término", debido a que considera que el presidente "tiene una visión muy retrógrada y reaccionaria".

Sin embargo, en este complejo escenario de desguace, advirtió que paradójicamente los discursos cotidianos de Milei en torno a que la educación pública es un lavado de cerebro y que las universidades adoctrinan, "es una provocación que ha tocado una fibra muy sensible, por lo menos de un sector muy importante de nuestra sociedad y está generando la reacción de la gente". 

Y en este sentido amplió: "Hasta hace pocos meses estábamos muy divididos, muy separados, muy alejados unos de otros, con los puentes rotos, hoy estamos encontrándonos en algunas causas que son fundamentales para nuestra identidad. Desde Sarmiento para acá diría que es la única política de estado -la educación- que hemos sostenido por más de un siglo, y hoy está siendo hoy amenazada".

Por otra parte, señaló como ciertos valores, que de alguna manera "dábamos por sobre entendidos y compartidos, hoy están bajo amenaza y nos empiezan a reencontrar, son como los constructores de esos puentes que estaban rotos".

"Personas que pensábamos diferente en un montón de cosas, hoy podemos marchar juntos, como el martes que viene por las universidades en todo el país o como el 24 de marzo por la defensa de la democracia y en contra de la dictadura militar".

En cuanto a este sentimiento de comunión entre diferentes fuerzas políticas, en pos de la defensa determinados derechos y acuerdos comunes, Avelluto comentó: "Mi visión es que tanta agresividad, tanta injuria, tanta ofensa, está empezando a generar algo nuevo, distinto, que no tiene que ver con ningún regreso hacia el pasado, sino con construir una sociedad mucho más democrática, mucho más igualitaria y mucho más justa que la que hoy nos está proponiendo el gobierno".

Seguidamente, consultado por la situación actual de PRO, el ex funcionario advirtió que "claramente hay una reconfiguración política muy profunda, mi percepción es que el Pro ya no es lo que era, es como una suerte de segunda marca de la libertad avanza".

"Yo me acerque -al PRO- hace 12 años más o menos, porque me atrajo su propuesta de centro, de estar alejado a los extremos, de imaginar aquello que Mauricio Macri repetía en la campaña del 2015: unir a los argentinos, el respeto por la opinión de los demás, por las ideas que no son las de uno, el diálogo, la conversación entre personas que piensan diferente. Yo sigo pensando lo mismo, el PRO ya no, el PRO tomó una decisión que lo alejó de aquello que representaba hace muchos años" expresó.

Finalmente, planteó que todos los sectores políticos están atravesando un proceso de reconfiguración, mientras que en simultáneo "en las bases de la sociedad civil, también se está produciendo esta reconfiguración" indicó.

"¿Qué cosas no estamos dispuestos a negociar? ¿Qué cosas no estamos dispuestos a aceptar? ¿Qué maneras de convivir no estamos dispuestos a tolerar? Esas preguntas tienen que ver con el tipo de sociedad que queremos construir" concluyó.

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