La empresa Google deberá pagar 118 millones de dólares luego de que un tribunal de San Francisco la encontrara culpable de mantener una discriminación salarial sexista, potenciando la desigualdad de género en materia salarial.
En el año 2017, más de 15.000 extrabajadoras de la compañía realizaron una denuncia conjunta en la que aseguraban que las mujeres percibían un sueldo menor al de los hombres por cumplir las mismas tareas y los mismos cargos.
La denuncia también añadía que en reiteradas ocasiones se les designaban puestos de menor rango, teniendo experiencias y calificaciones iguales a las de los hombres.
Si bien Google "niega todas las acusaciones de la denuncia y afirma que (el grupo) ha cumplido en todo momento de manera íntegra con todas las leyes, normas y reglamentos aplicables", si el acuerdo es aprobado por el juez pertinente, deberá indemnizar a la más 15 mil exempleadas que trabajaron en la firma desde 2013.