En la ciudad de Rafaela, unos 120 puestos de trabajo están en riesgo luego que trascendiera la decisión de la empresa TGS, contratista de la ejecución del Gasoducto Regional Centro II –que va desde Recreo a Sunchales- de despedir entre 80 y 85 trabajadores y dejar en funcionamiento solo la parte administrativa del obrador de Bella Italia.

Marcelo Jindra, secretario general de la Uocra Seccional Santa Fe, de la que depende la delegación rafaelina, aseguró  que "estamos muy preocupados por la situación, dado que hay muchos compañeros que tienen sus puestos de trabajo en riesgo. En el caso del gasoducto, nuestra información nos dice que están faltando aproximadamente seis meses de obra para terminarlo. Antes de las elecciones nos habían hablado de incorporar más personal para acelerar el ritmo y terminarla en cuatro meses. Pero ahora aparece ésto de que van a despedir a 80 compañeros y paran la obra porque dicen que hace seis meses que no cobran", señaló al diario Castellanos. 

Para Jindra "hay un trasfondo político, evidentemente. Suponemos que quieren ejercer algún tipo de presión sobre el nuevo gobierno. Por la razón que fuere, a los trabajadores no nos concierne porque ésto es un asunto entre el Estado comitente y los contratistas. Nos pasa lo mismo con los problemas en las obras del Acueducto. Las empresas dicen que no pueden cobrar los certificados de obras, pero no es problema de los trabajadores. Cuando se presentan a grandes licitaciones, estas empresas tienen que justificar que están en condiciones de cumplir estos contratos, tienen espaldas económicas y financieras importantes. Pero parece que siempre el hilo se corta por los trabajadores».

En ese sentido, Jindra subrayó que «el obrero de la construcción vive día a día. Dejarlo sin trabajo es cortarle el sustento para él y su familia. No tienen forma de aguantar dos o tres meses sin cobrar un sueldo. Es un momento donde también están cayendo las obras privadas, nos acercamos a fin de año, es un daño muy grande que sufre el trabajador. Y si estas medidas que nosotros consideramos arbitrarias e injustificadas son para presionar a algún gobierno, sea del signo que fuere, como organización gremial no podemos dejar de actuar con toda la fuerza que nos da la ley", señaló el dirigente sindical.

¿Se para el gasoducto?

Respecto a la obra del gasoducto, los despidos se harían en dos tandas. Una el 30 de noviembre y la otra entre el 7 y el 15 de diciembre. Javier Fernández, de la delegación local de Uocra, sostuvo que el parate afectaría "a muchos trabajadores de Rafaela. En la obra también trabaja gente foránea, pero los despidos previstos afectarían principalmente a la gente de Rafaela. Si contamos que serían 80, más otros 28 cesanteados en el tramo del acueducto entre San Mariano y Rafaela, que también en su mayoría son de la ciudad; más otros 10 que quedan haciendo la última parte de la obra del Canal Norte que está próxima a finalizarse, el panorama que tenemos es muy preocupante estamos hablando de cerca de 120 compañeros que quedarían sin trabajo".

La paralización del gasoducto sería otro golpe importante no solo al empleo local, sino a la expectativa de contar con una obra fundamental para el desarrollo regional. TGS es una de las compañías más grandes del país en su rubro y administra gasoductos e infraestructura energética en toda Argentina. El presupuesto original de los trabajos contratados con TGS era del orden de los mil millones de pesos, aunque las redeterminaciones de precios posteriores seguramente más que duplicaron su costo, teniendo en cuenta las devaluaciones y los cambios en el valor de los equipos a instalar.

En cuanto al avance de la obra, si bien se han colocado la mayoría de las cañerías troncales, todavía restan las acometidas hacia las estaciones reductoras, que también están en fase de ejecución. Solo en Rafaela hay 4 de estas estaciones que deben ejecutarse, pero también hay en Sunchales, en Esperanza y en otros puntos del tendido.