Los jueces Marcela Canavesio, Rodolfo Svala y Carlos Leiva dieron a conocer su veredicto en la casa que investiga la explosión en el edificio de calle Salta 2141 de la ciudad de Rosario en la que murieron 22 personas en agosto de 2013.
El único condenado de los 11 imputados fue el gasista Carlos García, quien fue encontrado responsable del delito de "estrago culposo agravado" por lo que deberá cumplir una pena de cuatro años de prisión efectiva.
Sin embargo, el tribunal decidió absolver al ayudante de García, Pablo Miño, y al otro gasista José Luis Allala; a los empleados de Litoral Gas, Viviana Beatriz Leegstra (gerente técnica), Claudio Tonucci (jefe de mantenimiento de redes), Guillermo Oller y Luis Curaba; y también a los administradores del edificio: Norma Bauer, Carlos Repupilli (asesor legal) y la administradora del consorcio Mariela Calvillo.
Vale recordar que los únicos querellantes en la causa por parte de las víctimas fueron los familiares de Débora Gianángelo, quienes sostenían que todos los acusados formaron parte de una cadena de responsabilidades que derivaron en el estrago que causó 22 muertes.